La preeclampsia es una condición médica que solo ocurre durante el embarazo. Según la Biblioteca Nacional de medicina de los Estados Unidos, se denomina preeclampsia cuando una mujer embarazada desarrolla hipertensión arterial y proteína en la orina después de la semana 20 de gestación.
Afecta del 5% al 8% de las mujeres embarazadas.
La preeclampsia puede ser leve, moderada o severa; dependiendo de la presión arterial y la pérdida de proteínas en la orina. Además, puede aparecer poco a poco o bruscamente al final del embarazo.
Es la causa del 15% de los nacimientos prematuros en los Estados Unidos. A pesar de esto, la mayoría de las mujeres que padecen preeclampsia durante el embarazo tienen bebés sanos.
Además:
Cuanto antes aparezca la preeclampsia, mayores serán los riesgos para la madre y el bebé. Sin embargo, por lo general, aparece en las últimas semanas de embarazo y con un control médico adecuado, reposo, dieta sana y supervisión del feto, no hay riesgos importantes.
Pero, cuando la preeclampsia es severa puede afectar a órganos importantes de la embarazada y también puede provocar alteraciones en la placenta. En estos casos, es recomendable que el bebé nazca lo antes posible, incluso cuando hay riesgo de que el bebé sea prematuro.
Causas
No se conoce la causa exacta, pero sin embargo se ha relacionado, según la web www.guiainfantil.com con:
- Trastornos autoinmunitarios
- Problemas vasculares
- Dieta
- Genes
Factores de riesgo
Hay algunos factores que aumentan la probabilidad de padecer preeclampsia, entre ellos, se incluyen:
- Primer embarazo
- Obesidad
- Mujeres con más de 35 años
- Antecedentes de diabetes, hipertensión arterial o enfermedad renal
- Sufrir estrés o realizar trabajos pesados
Síntomas
Los primeros síntomas de la preeclampsia pasan desapercibidos porque se confunden con los síntomas propios del embarazo. Entre estos se incluyen, el aumento de peso o la retención de líquidos.
Para detectar este problema es necesario acudir a todas las citas prenatales y llevar un seguimiento de la presión arterial y la orina, para detectar proteínas (proteinuria).
- Cuando se encuentran 300 mg o más de proteínas por litro en la orina se llama proteinuria.
- La presión arterial se considera alta cuando la presión sistólica es mayor de 140mm. y la diastólica es más de 90 mm.
Síntomas de Preeclampsia leve
- Hipertensión de 165-140 mmHg / 105-90 mmHG.
- Proteinuria de 300 mg – 5 g por litro de orina de 24 horas.
- Tobillos y piernas hinchadas.
Síntomas de Preeclampsia grave
- Hipertensión de más de 165 mmHG / 105 mmHG.
- Proteinuria de más de 5 g por litro de orina de 24 horas.
- Hinchazón generalizada.
- Fallo renal, orina poco.
- Fallo hepático.
- Hinchazón de manos, cara y ojos.
- Aumento repentino de peso (más de 2 kg por semana).
Prestar atención a los siguientes síntomas y acudir al médico inmediatamente:
- Dolor de cabeza intenso y persistente.
- Dolor abdominal en el lado derecho, debajo de las costillas.
- Irritabilidad.
- Orinar con poca frecuencia.
- Náuseas y vómitos.
Complicaciones
La preeclampsia puede complicarse y dar a lugar a condiciones médicas más graves en las que tanto el bebé como la mujer están en peligro. Las complicaciones más comunes son:
Síndrome de HELLP
Afecta sobre todo a la sangre y al hígado. Según webconsultas, se caracteriza por provocar en la embarazada:
- Rotura de los glóbulos rojos dentro de los vasos sanguíneos.
- Déficit de plaquetas.
- Transaminasas y bilirrubina elevadas.
Los síntomas incluyen: dolor abdominal, náuseas, vómitos, dolor de cabeza y diarrea.
Hasta un 20% de las mujeres con preeclampsia grave o severa desarrollan el Sindrome de HELLP y un 8% se presenta después del parto.
Eclampsia
Ocurre cuando la contracción de los vasos sanguíneos es tan grande que pasa poca sangre a través de ellos y se producen microinfartos.
El órgano más afectado es el cerebro, por eso, se producen convulsiones y coma.
Tratamiento
El tratamiento dependerá del grado de severidad de la preeclampsia y de la edad de la embarazada, pero la única cura es dar a luz al bebé.
[quote_box_center]Si el bebé está suficientemente desarrollado, lo cual sucederá a partir de las 37 semanas más o menos, es probable que el médico aconseje tener al bebé lo antes posible con el fin de evitar complicaciones.[/quote_box_center]
Preeclampsia leve
Por lo general, el tratamiento en estos casos es que la embarazada esté en reposo. Se ha demostrado que solo con esta medida la tensión arterial desciende hasta valores normales.
También se pueden utilizar fármacos para tratar la hipertensión, cuando la medida anterior no funciona.
Una vez se alcanza la semana 37 de embarazo, el bebé está lo suficientemente desarrollado para nacer y se provocará el parto. Se intentará primero el parto vaginal que la cesárea.
Preeclampsia grave
En los casos de preeclampsia grave lo ideal es la interrupción inmediata del embarazo para evitar complicaciones mayores (webconsultas). Sin embargo, esto no siempre es posible y se debe instaurar un tratamiento.
Es muy probable que la mujer deba permanecer ingresada en el hospital para ser controlada por los profesionales médicos. Además, se le pueden administrar medicamentos para acelerar el desarrollo pulmonar del bebé, con el fin de que pueda nacer lo antes posible.
Si se han dado complicaciones como el Síndrome de HELLP, la embarazada debe quedarse en el hospital e interrumpir el embarazo cuanto antes. En este caso, es posible que sean necesarias las transfusiones de sangre.
Prevención
Como no se conoce la causa exacta es difícil de prevenir. Sin embargo, acudir a las citas prenatales es importante para evitar complicaciones y llevar un control de la presión arterial y los posibles síntomas que pueda tener la mujer embarazada.
Hola, muy buena la informaciòn me ayudo mucho.