Si tu bebé se pone a llorar y no se calma puede ser una situación especialmente agobiante si eres madre primeriza. Puede que hayas probado diferentes consejos para calmar a u bebé, pero uno de los más efectivos es sin duda el arrullo del bebé. Sin embargo, puede que aún no conozcas cómo arrullar a tu bebé, por lo que hoy hablaremos de esta técnica que se te será de gran ayuda.
Entre todas las técnicas que existen no cabe duda de que el arrullo es una de las más prácticas y que tienen más eficacia. Esta técnica se destaca por ofrecerle al pequeño calidez y comodidad como si estuviera en el vientre materno, además de que aporta muchos beneficios para su salud.
Así que, si quieres conocer todo acerca de arrullar a tu bebé, te invito a que sigas leyendo atentamente este post. Aquí encontrarás toda la información que necesitarás, así como las precauciones que debes tener al respecto.
¿Qué es arrullar a un bebé?
Arrullar a un bebé es una técnica en la cual se arropará al bebé con una manta o pañuelo de manera que el cuerpo quede completamente envuelto. En esta técnica únicamente la cabecita del bebé sobresale, y es una técnica muy empleada para que el bebé pueda conciliar el sueño o para que puedas tranquilizarlo cuando está inquieto o molesto.
Cuando el bebé nace, este pasará de un espacio limitado y seguro, a un espacio que está repleto de estímulos, por lo que es normal que se sienta desprotegido. El arrullo del bebé es una técnica que permite que el bebé pueda llevar mejor la transición entre el útero y el exterior.
Beneficios que aporta el arrullo del bebé
Ahora que ya sabemos qué es el arrullo, debemos conocer los beneficios que este le aportará a tu bebé. Esta técnica tiene como objetivo simular las condiciones del vientre materno, y dentro de los beneficios que se tienen al utilizarla están:
- Alivia los cólicos.
- Permite ayudar a regular la temperatura corporal, porque los bebés no pueden hacerlo cuando acaban de nacer.
- Permiten tener una mejor postura, lo que te ayudará a conciliar el sueño rápidamente.
- Aporta una sensación de seguridad y protección.
- Ayuda a calmar a los bebés y a relajarlos.
- Evitará cualquier tipo de espasmos de los brazos y piernas que puedan interrumpir su descanso debidos al reflejo Moro.
Como puedes ver los beneficios son muchos al aplicar esta técnica. Ten presente que el reflejo moro es una respuesta del organismo de tu bebé, que se produce cuando se tiene la sensación de falta de apoyo del cuerpo. Este es un reflejo que mostrará que tu bebé se está desarrollando correctamente porque es uno de sus reflejos primarios.
¿Cómo hacer para arrullar a un bebé? Paso a paso para conseguir el éxito
Te puedes encontrar con diferentes formas para arrullara a un bebé, que pueden ser una buena solución. Las técnicas más conocidas para arrullar a un bebé serán:
Método rápido
Es la técnica de arrullo de bebés más fácil de hacer, y para hacerla debes seguir estos pasos:
- Debes extender la tela y tumbarás al bebé justo en el centro del cuadrado de manera que su cabecita esté fuera.
- Toma las esquinas superiores de la tela, y crúzalas hasta el hombro opuesto, sujetándolas bajo la espalda.
- Repite el proceso con la otra esquina, asegurándote de que el pañuelo no quede tapándole la cara.
- La tela que está debajo, la debes doblar, y meterla por dentro a la altura de los hombros.
Como puedes ver es una técnica muy sencilla para que puedas arrullar a tu bebé, y así conseguir que pueda descansar mucho mejor.
Método Australiano
Se trata de un método que es más laborioso, pero al mismo tiempo es bastante práctico, por lo que si lo dominas será una gran opción a considerar. Para hacer esta técnica tendrás que seguir estos pasos:
- Se debe colocar la tela en forma de rombo y doblas la esquina superior hacia abajo.
- Se debe recostar al bebé encima de la tela, de tal forma que sus hombros estén apoyados sobre el doblez.
- A continuación, se debe colocar el brazo derecho del bebé recto, paralelo al cuerpo, cruzando la esquina derecha hasta llegar al otro lado. En ese momento la meterás por debajo de la axila izquierda debajo de su cuerpo.
- Toma la punta inferior de la tela y dóblala hacia arriba, metiéndola por dentro de la que cruzaste.
- Es hora de colocar el brazo izquierdo también paralelo al cuerpo, cruzando la esquina izquierda de la tela hacia el lado derecho y metiéndola por debajo del cuerpo.
Es una técnica muy fácil de hacer cuando la dominas, por lo que podrás calmar a tu bebé de una forma bastante efectiva.
Método manos libres
Si tu bebé es inquieto, esta técnica es la más útil que podrás encontrar si tienes a un bebé inquieto, en especial porque es la que brinda una mayor libertad para moverse. El procedimiento para hacer esta técnica es igual que la técnica australiana.
Sin embargo, antes de hacer los dobleces laterales, se deben doblar los brazos a la altura del pecho, para que las manos queden cerca de su cara. No se dejarán rectos paralelos al cuerpo como en la técnica australiana.
Para que veas de una forma más práctica los diferentes métodos para hacer el arrullo de tu bebé te tengo este vídeo donde los explican bastante bien:
¿Cómo saber qué tipo de arrullo escoger?
Debes escoger muy bien la manta o pañuelo que vas a utilizar como arrullo, y esta debe ser cuadrada y tener unas medidas de 1 a 1,2 metros. Siempre será importante que escojas un tejido que sea suave y delicado, para cuidar la piel del recién nacido. Además, debe ofrecer un ajuste perfecto para generar calor sin que sea agobiante para tu bebé.
Sin embargo, debes tener en consideración que durante el verano siempre se deben escoger telas suaves como las muselinas, porque estas no aportarán mucho calor. Pero, para el invierno siempre se debe optar por algo más abrigado, para que el bebé no vaya a pasar frío. Lo ideal en estos casos son fibras de algodón, dralón o de bambú. Estos materiales son hipoalergénicos y tienen una gran suavidad para ser respetuosos con la piel del bebé.
Precauciones a considerar respecto al arrullo del bebé
Esta es una práctica muy beneficiosa para tu pequeño, pero tiene algunas contraindicaciones y siempre se deben tomar algunas precauciones para llevarla a cabo. Ten en cuenta estas precauciones para evitar cualquier problema que puedas causar al bebé:
- Nunca debe ser demasiado apretado, y evita el uso de telas que generen calor excesivo, porque podrías sofocar al pequeño.
- Es importante que el bebé pueda mover las piernas, porque así se evitará que desarrolle displasia de cadera. En caso de que ya padezca esta patología, el arrullo está completamente contraindicado.
- El bebé siempre debe estar acostado boca arriba, para evitar el riesgo de muerte súbita.
- No se debe tapar la cara del bebé en ningún momento para evitar problemas que puedan sofocarlo.
- Es aconsejable usarlo únicamente en momentos puntuales, y no por largos períodos de tiempo. No está recomendado para usarlo durante el sueño nocturno, además al bebé le puede costar más despertarse.
- Si el bebé tiene fiebre, el arrullo está completamente contraindicado.
- En caso de que el bebé no se encuentre cómodo, es preferible no hacerlo.
¿Hasta qué momento se puede hacer el arrullo?
Es importante tener en cuenta que el arrullo se puede comenzar a emplear desde el nacimiento del bebé. En todo caso, servirá en gran medida para tranquilizarlo cuando llora o para ayudarlo a dormir mejor, ayudando al bebé a que se sienta mucho más calmado.
Sin embargo, desde el segundo mes de vida del bebé, debe comenzar a reducirse su uso, porque el bebé comienza a necesitar una mayor libertad de movimiento. Cuando se alcanzan los 3 meses, muchos bebés se sienten incómodos dentro del arrullo.
Para que se deje de arrullar definitivamente al bebé, debes tomar como referencia el momento en el que aprende a darse la vuelta solo, o cuando comienza a moverse más. Esto debido a que en estos momentos es más propenso a quedar boca abajo con el movimiento, o puede hacer que la tela cubra su cara, por lo que es recomendable dejar de utilizarlo.
Conclusión
El arrullo es una técnica que te permitirá conseguir tranquilizar a tu bebé de una forma bastante efectiva. Recuerda que, un bebé incómodo puede llegar a tener una gran ansiedad, y para los padres puede llegar a ser inquietante por lo que el arrullo es una técnica que permitirá que puedas conseguir calmar a tu bebé.
Ya que conoces cómo arropar al bebé en la cuna, no debes dudar en aplicar esta técnica con tu nuevo bebé. Además, podrás ayudarle a que pueda regular su temperatura corporal, y que pueda calmar sus cólicos, lo que sin duda son grandes ventajas para que tu bebé tenga una mejor salud.