El cordón umbilical conecta al bebé con el vientre de la madre. Es el encargado de transportar oxígeno y nutrientes del torrente sanguíneo de la madre al bebé. Poco después del nacimiento este cordón se corta, es un procedimiento indoloro para ambos, que por lo general se ha estado realizando segundos después del nacimiento del bebé.
Cortar el cordón umbilical no es una cuestión de debate ya que es necesario hacerlo en todos los nacimientos. Lo que se debate actualmente es el momento adecuado para realizar dicho pinzamiento.
Investigaciones
Un estudio reciente realizado por científicos de la Universidad de Granada y el Hospital Clínico San Cecilio de Granada y publicado a finales de 2014 en la revista Pediatrics, ha demostrado que un simple retraso de dos minutos en el pinzamiento del cordón umbilical del recién nacido puede conducir a un mejor desarrollo durante los primeros días de vida del bebé.
[quote_box_center]En este estudio se señala que el corte tardío del cordón umbilical produce un aumento en la capacidad antioxidante de los recién nacidos a término y la moderación de los efectos inflamatorios en los partos inducidos.[/quote_box_center]
Lo más importante es:
También se ha demostrado que cortar el cordón umbilical demasiado pronto niega a los bebés un suministro importante de sangre, de manera que puede reducir la cantidad de hierro que el recién nacido recibe. La deficiencia de hierro y la anemia causada por esta deficiencia son problemas de salud importantes en muchos niños alrededor del mundo. Según el periódico BBC, se estima que alrededor del 25% de los niños en edad preescolar tienen anemia por deficiencia de hierro.
Cuando un bebé nace, aproximadamente un tercio de la sangre de este se encuentra todavía en el cordón umbilical y la placenta. Cortarlo demasiado pronto hará que el bebé no pueda recibir ese tercio de sangre y los nutrientes (como el hierro) que esta tiene.
[quote_box_center]Los científicos calculan que dejar al recién nacido unido al cordón durante al menos tres minutos después del nacimiento, puede aumentar su volumen de hierro en sangre en un 35%. [/quote_box_center]
Según señala el diario ABC, cortar el cordón umbilical dos minutos después del nacimiento ayuda a prevenir la deficiencia de hierro durante la infancia y además, mejora las habilidades de motricidad fina y sociales de los niños a los 4 años, solo en los niños, no en las niñas.
Hace unos 60 años los médicos comenzaron a cortar el cordón umbilical lo más pronto posible, porque creían que eso podía reducir el riesgo de hemorragia de la madre. Sin embargo, los últimos estudios han demostrado que el corte tardío del cordón umbilical puede tener beneficios a largo plazo para el bebé y no hay riesgos para la madre.
Los resultados obtenidos eran contradictorios, ya que algunas investigaciones apuntaban que retrasar el corte del cordón umbilical aumentaba el riesgo de ictericia en el bebé. Sin embargo, son mayores los beneficios que los riesgos que se corren al cortar el cordón umbilical varios minutos después del parto.
Recomendaciones
La Organización Mundial de la Salud recomienda esperar al menos dos minutos después del nacimiento para cortar el cordón umbilical, o hasta que se detenga las pulsaciones del mismo que son visibles. También, desde la Sociedad Española de Neonatología, Miguel Sáenz de Pipaón, señala que es recomendable cortar el cordón umbilical después de 2 o 3 minutos del nacimiento siempre que sea posible.
¿Tal vez te preguntes que debes hacer?
Algunos profesionales están poniendo en práctica el corte tardío del cordón umbilical. Consulta con tu médico o matrona y haz que se incluya en el procedimiento de tu plan de parto siempre que sea posible y no hayan complicaciones.
Los beneficios de esta práctica están demostrados y pueden evitar problemas de salud en tu bebé a largo plazo (anemia por deficiencia de hierro). Las recomendaciones de la OMS y otras entidades son claras y aconsejan que el corte del cordón umbilical no se realice de forma inmediata. De esta manera, el bebé se beneficiará del suministro de sangre que en el momento del nacimiento todavía se encuentra en el cordón y la placenta.
