Todos los padres nos planteamos si lo estamos haciendo bien con nuestros hijos, y la mayoría, en algún momento de nuestra paternidad, estamos seguros de que estamos fallando. Ahora, un grupo de psicólogos han hecho una lista de los errores más comunes de los padres.
1. Darles demasiadas opciones
Muchos padres piensan que los niños siempre deben tener un sinfín de opciones, cuando la realidad es que los niños pueden sentirse abrumados si siempre se les da tantas opciones.
2. Elogiarlos por todo lo que hacen
Es muy común ahora ver a los niños que son casi adictos de elogio. No harán nada a menos que haya una recompensa por ello.
3. Obsesionarnos con intentar hacerlos felices
Su trabajo consiste en aprender a ser felices, y nunca se puede obligar a un niño a ser feliz.
4. Permitirles todo
Casi siempre terminan creyendo que las compras conducen a la felicidad. Esto establece un objetivo que nunca satisfacen, y puede acabar en adicciones y compulsiones.
5. Mantenerlos demasiado ocupado
Suele ocurrir con los deportes. Muchos padres creen equivocadamente que las «actividades» mantendrán su niño alejado de los problemas, pero muchas veces esto da lugar a que el niño se agote o incluso se convierta en un matón.
6. Hacerles demasiado arrogantes
Suele ocurrir con los deportes. Muchos padres creen equivocadamente que las «actividades» mantendrán su niño alejado de los problemas, pero muchas veces esto da lugar a que el niño se agote o incluso se convierta en un matón. Puede ser tentador para los padres promover la inteligencia como el fin de todo.
Sin embargo, esto puede llevar convertir a un niño en arrogante, pensando que todos los demás son estúpidos o secretamente creyendo que tienen siempre la razón y son un fraude. El resultado, nadie le gustan esos niños.
7. Pensar que una religión estricta les dará valores perfectos y seguros
La primera vez que ven la hipocresía de sus padres o los líderes espirituales tan queridos, su castillo de naipes empieza a caer.
8. Ocultarles información común sobre temas importantes, como el sexo
Muchos padres tienen miedo de hablar de sexo, y creemos que evitar esta charla con sus hijos los salvará. Pero todas hemos visto a niñas de 13 años de edad quedar embarazadas por falta de información.
9. Ser súper crítico con los errores del niño
Puede ser fácil pensar que un intenso marcaje promueve el éxito y hace que los sean niños mejores. Pero los niños criados de esta manera son impulsados a la perfección en todo, desde miradas, simpatía, deportes, inteligencia, o lo que sea. Cuando cometen un error, aunque sea pequeño, sienten que no tienen ningún valor como ser humano y comienzan a sentirse tan enojados que en algunos casos recurren a auto-dañarse, incluso hasta el punto del suicidio.
10. Usar la vergüenza, el rechazo, o las amenazas
No implica que haya una posibilidad de que pudieran no amar a sus hijos, ya que algunos padres lo hacen con el fin de motivar a sus hijos. Puede funcionar a corto plazo, pero la sombra de ese trato hará su efecto antes o después.
11. Dejar que los niños hagan cosas inapropiadas para su edad
Los niños no deben trabajar, ni dentro ni fuera de casa. Una cosa es que ayuden a recoger la mesa y enseñarles a ser responsables, pero los niños deben llevar vida de niños y estar alejados de los problemas de los mayores.
12. No limitar el tiempo delante de la pantalla
Ya se trate la televisión, videojuegos o teléfono. Conozco a una familia donde madre e hijo no se separan del teléfono y es su única forma de relacionarse. ¿De verdad queremos tener una familia así?
13. Dejar que los niños no se aburran
Algunos padres creen que los niños deben ser estimulados en todo momento y es su trabajo evitar el aburrimiento. Si no le dejamos tiempo para aburrirse, los niños no aprenderán a ser creativos y encontrar la forma de salir del aburrimiento por sí mismos.
14. Sobreproteger a los niños de sus propias consecuencias y pérdidas
Hay muchos padres que, con buenas intenciones, le dan a sus hijos todo, desde un simple juguete a sacarlos de problemas legales, y de repente se sorprenden cuando el niño no respeta nada. Todos necesitamos aprender que perder es sólo otra manera de ganar en sabiduría y la experiencia de lo que no se debe hacer.
15. No dejarles jugar peligrosamente
Se ha demostrado que los niños que van a colonias o campamentos enferman menos, se adaptan mejor y también se llevan mejor que sus pares los niños que se mantienen en la ciudad, libres de insectos y la vida “rupestre”. Sobreprotegerles demasiado puede no ser bueno para ellos. Deben aprender a protegerse, a resolver sus problemas y, además, el contacto controlado con otros entornos les ayudará a tener un sistema inmunológico más fuerte.
16. No preguntarles sobre su día
«¿Cómo te ha ido el día?» Los niños duermen mejor y se sienten más queridos cuando los padres muestran interés por lo que les sucedió, ya que les hace sentir que sus pequeñas cosas también son importantes para ti.
17. No leer a niños muy pequeños
La lectura requiere que el niño esté en silencio y use su imaginación. Todos lo que no hacen los vídeos. Los prepara para escuchar en la escuela y ser capaz de usar su imaginación para la creatividad y alternativas como un recurso.
18. Quitarles el chupete demasiado pronto
Los padres saben que el chupete es un símbolo exterior de inseguridad, por lo que tienden a quitarlos tan pronto como sea posible, en vez de conseguir dar seguridad al niño permitiéndole que lo deje de forma natural.
19. No controlar la comida
Sobre todo preguntando: «¿Estás lleno?» Cuando esto sucede, por lo general nuestros hijos o lloran o llenan el plato para dejarlo tal cual. Esto es un viejo programa de supervivencia, siempre queremos tener más, aunque no lo necesitemos. Los niños persiguen una sensación de estar completamente lleno, sin comprender que cada vez que se llena, su estómago se adapta y se expande.
20. Dar nalgadas a niños mayores de 5
Y yo diría que a menores tampoco. Algunos padres piensan que les enseñará a comportarse bien, pero el uso de castigos corporales no funciona tan bien como el amor. Piensan eso de “la letra, con sangre entra”, pero no es así. Dejamos a un niño enojado, intimidado, engañado o temeroso.
Muchas gracias!! Sabios consejos!!