A veces, todo se nos hace un mundo. La casa, el trabajo, la familia, todo nos puede, pero una frase mágica, nos puede hacer resurgir de las cenizas.
1. Te quiero.
Estas dos palabras, dichas por tu hijo, te dan fuerzas suficientes para poder con todo. Si ya viene acompañada de un beso y un abrazo, ¡nada podrá contigo!
2. Gracias.
Por ayudarme, por cuidarme, por prepararme la comida, por darme tantos caprichos, por existir. Estas 7 letras dichas en el momento adecuado nos pueden dar superpoderes hasta en nuestros momentos más bajos.
3.¡Qué guapa estás!
Todas hemos tenido días en los que no nos vemos ben con nada. Da igual que nos probemos millones de modelitos y o nos marcan mucho, o el color no nos sienta bien, o se ve anticuado,…Nada nos convence. Pero si nuestra pareja a nuestro hijo nos la dice, nos veremos perfectas hasta con un saco de papas.
4. Te necesito.
Cuando son unos bebés, aparte de que no pueden, no hace falta que nos digan nada, porque lo sabemos. Pero con forme van creciendo y se hacen más independientes, empezamos a sentir que los perdemos un poco. Así que, un “Te necesito”.
5. Eres mi mejor amiga.
La ilusión de toda madre, escuchar decir esto a nuestros hijos. Como hija, sé que eso deja de ser así en la adolescencia, así que habrá que aprovechar mientras podamos.
6. Cuando sea madre quiero ser como tú.
Supongo que escuchar esta frase es el objetivo que tenemos todas. Hacer tan buen trabajo que nuestras hijas lo tengan como referente en su futuro.
7. Tenías razón.
¡Sí! Esta frase se acepta de hijos y parejas. No hace falta, porque ya lo sabíamos, pero, por favor, reconocedlo de vez en cuanto, que gusta escucharlo.
8. Te invito a tomar un café.
Esta frase la escribo más bien desde el punto de la hija, una hija por que en el futuro su propia hija se acuerde de esto. Un café, a almorzar, o solo pasar por casa porque sí, sin ir a pedir o buscar algo. Ir a ver a una madre, simplemente por el hecho de querer verla.
9. Sin ti la familia no sería nada.
Otra gran frase que, ya venga de tu pareja, de tu hijo, o de tu propia madre reconociéndote le trabajo bien hecho, te llena.
10. Lo que soy te lo debo a ti.
Mi peque es demasiado pequeña para decir estas grandes frases, pero si algún día la dice, ¡creo que me derretiré al instante!
11. Soy feliz.
Esta frase creo que es la que resumen el propósito de toda una vida de una madre. Ver si nuestros hijos son felices. Que crecen bien, que disfrutan de la vida y estamos ahí para verlo y oírselo decir.
